Insectos
SIENTO Y ORIGINO
Mariana Gutiérrez-García, divertida
11/30/20222 min read
También los machos cuidan a las crías
Los insectos han sido muy creativos a lo largo de la evolución y supieron cómo ocupar la tierra, el agua y los cielos. Los que habitan en el agua lo hacen en aguas dulces, por lo que en el agua de mar como tal no encontramos insectos, sin embargo, hay una enorme variedad de insectos acuáticos en los estuarios, que son el punto de encuentro entre el agua dulce de un río desembocando en el mar, y el agua salada de este.
La chinche de agua es un insecto al que le gustan las corrientes de agua, pasa la mayor parte su vida sumergida en el agua, aunque posee la maravillosa capacidad de volar si por algún motivo se encuentra fuera del agua. Existen 23 especies diferentes en México. Son de color café grisáceo, de forma ovalda y aplanados. Tienen un par de patas para capturar a sus presas y otros dos diseñados para nadar.
Se alimentan de pequeños invertebrados casi siempre, y de vez en cuando, atrapan presas más grandes como peces o ranas. Tiene un aparato bucal muy interesante (como el de las luciérnagas), un tipo de “aguja” que inyecta toxinas a su presa para paralizarla y una enzima digestiva que le ayuda a “licuar” los tejidos internos para poder succionarlo después.
Al alimentarse, entre otras cosas, de larvas de mosquitos, son quienes regulan la población de esos insectos que nos gustan tan poquito, contribuyendo al equilibrio ecológico y a nuestra salud.
En esta ocasión me interesó hacer mención de este insecto, tanto por el lugar cercano a las playas que puede habitar, como porque con el tema de la reproducción se habla mucho de las hembras, de las madres, y poco del enorme papel que cumplen muchos machos en el cuidado de los huevos o de las crías. Hay una familia de chinches de agua, la Belostomatidae, en la cual las hembras de diferentes especies depositan los huevecillos en “la espalda” de los machos, que hacen cargo de ellos generando las condiciones de oxigenación y humedad que necesitan, y ahuyentando a los depredadores para que la mayor cantidad de crías pueda nacer.
Y aunque su mordida o piquete no son peligrosas para nosotros los humanos, no recomiendo que se agarren porque sí es doloroso. Por algo en ingles le llaman “teo bitter” (mordedor de dedos del pie). Pero puedes experimentarlo y luego nos cuentas cómo estuvo :p
Chinche alimentándose de una larva de escarabajo. La flecha señala el pico (aparato bucal) de la chinche.
Fotografía de Daniel Reynoso-Velasco, obtenida del INECOL