¿Flamenco o flamingo? Una aventura lingüística
RICARDA EL FLAMINGO
Lingüista Lucia González
¿Flamenco o flamingo? Una aventura lingüística
Después de leer el cuento de Ricarda, seguro te quedaste pensando: ¿se dice “flamenco” o “flamingo”? ¿Y por qué importa tanto una sola palabra?
Primero, vamos a aclarar: en español, el nombre correcto del ave rosada y elegante es “flamenco”. La palabra “flamingo” viene del inglés, y aunque muchas personas la usan, no es la forma que encontramos en los libros de gramática o en los diccionarios en español.
Pero aquí es donde entra la lingüística, que no es lo mismo que la gramática. La gramática muchas veces nos dice cómo “deberíamos” hablar. La lingüística, en cambio, estudia cómo hablamos de verdad. Es como ser un detective del lenguaje: observa, escucha y aprende de las palabras que usamos todos los días, sin decir cuál está bien o mal.
Así que, si alguien dice “flamingo” en vez de “flamenco”, no significa que está hablando mal. ¡Solo está usando el lenguaje de una manera diferente! Tal vez vio muchos documentales en inglés, o tal vez le gusta cómo suena. Eso también es parte de cómo el idioma cambia y crece.
Ahora, tal vez te diste cuenta de otra cosa: Ricarda es hembra, o como diríamos de una persona, es “mujer”. Entonces, ¿no deberíamos decir “la flamenca” o “la flaminga”? Aquí es importante saber que en el idioma, el género gramatical (como decir “el flamenco”) no siempre coincide con el género biológico o identitario (como ser mujer o hembra). Es solo una forma que tiene el idioma de clasificar palabras, no personas.
En resumen: sí, en español decimos “flamenco”, pero si escuchas a alguien decir “flamingo” o “flaminga”, no hay que corregir con enojo. Mejor pregúntate: ¿por qué usa esa palabra? ¿Qué historia hay detrás? Porque así es como empieza una verdadera aventura lingüística.
